Renta fija, un arma de doble filo

Generalmente la renta fija se asocia con un activo libre de riesgo y que además genera una rentabilidad que es conocida de antemano (Mascareñas Pérez-Íñigo, 2002; Elvira, Larraga, y Puig, 2017). Sin embargo, identificar la renta fija con estas cualidades e incluso referirse de forma genérica a los activos de este tipo como “bonos” puede llevar a confusión y, de hecho, se observa que la terminología utilizada en la literatura puede ser en muchos casos excesivamente ambigua. La falta de claridad y precisión al hablar de renta fija puede ser un arma de doble filo, especialmente en el caso del inversor minorista que necesita entender de manera precisa el propio concepto de renta fija. Por ello, en este trabajo se analizan y se clarifican las características de la renta fija haciendo referencia a los distintos tipos de riesgos a los que puede estar sometida (Martín Mato, 2001; Caldeira et al., 2015; Li y Song, 2015; Elvira, Larraga, y Puig, 2017). Asimismo, se incide en la idea de que en la renta fija subyace una fórmula financiera predeterminada que es la que nos permite distinguirla claramente de la renta variable.

 

David Caridad de la Peña
Begoña Álvarez García
Lucía Boedo Vilabella