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Ed. 36. Vol.7 Nº 4. Noviembre ‘18-Febrero ‘19
DOI:http://dx.doi.org/10.17993/3cemp.2018.070436.34-49/
El marketing de contenidos puede ser de varios tipos y con los años se han ido adaptando a los
cambios, razón por la que el Content Marketing Institute (CMI, 2016) da a conocer cada año las
tendencias más utilizadas cuando a tipos de marketing de contenidos se reere. Las más utilizadas son
los contenidos producidos para ser difundidos en social media, blogs, artículos en sitios web, e-book,
videos, ilustraciones e infografía, webinars y las aplicaciones móviles. Para la correcta utilización de
los tipos de contenidos es necesario establecer una estrategia en la se dena los objetivos a alcanzar
con el contenido para la marca, establecer métricas adecuadas desde un inicio, conocer el público
objetivo estableciendo un perl de los consumidores, determinar una linea editorial para la creación
del contenido, y una vez creado el contenido escoger los canales adecuados y el calendario para la
hora de medir los resultado de la estrategia utilizada (Ramos, 2013).
2.3. RELACIÓN ENTRE LA INVESTIGACIÓN UNIVERSITARIA Y LA CULTURA
INVESTIGATIVA
Tamayo (2002) mencionó que la investigación es un proceso de búsqueda de información dedigna,
utilizando el método cientíco con el proposito de entender, vericar, corregir y aplicar conocimientos,
llevándola a cabo a través de una serie de pasos para cumplir un objetivo. La investigación es algo
valioso para el desarrollo y progreso de una sociedad, permitiendo el contacto de la misma con la
realidad que le rodea, siendo esta una de las misiones más importante de la universidad moderna,
ya que si careciera de ella simplemente se reduciría a un establecimiento de enseñanza (Marrero
Pérez y Pérez Pérez, 2013). La Universidad es el lugar indicado y creado con el n de permitir el
proceso creativo, que es una base para el desarrollo, siendo su responsabilidad preparar profesionales
ideóneos que la sociedad necesita. Se puede entonces denir que la investigación universitaria es la
que el deber que tiene la universidad con la sociedad de producir, generar y mantener conocimientos
cientícos para benecio de la misma.
Para el desarrollo de la investigación dentro de las universidades se ha podido evidenciar que es
necesario una cultura investigativa. Se entiende por cultura al conjunto que incluye conocimientos,
creencias, la moral, costumbres, habilidades y hábitos adquiridos por la sociedad que lo rodea (Altieri
Megale, 2001). La cultura investigativa se compone entonces por manifestaciones organizacionales,
culturales, de valores, técnicas, actitudes que estén directamente relacionadas con el fomento,
práctica y difusión de la investigación. Para que ésta se desarrolle en una Universidad es necesario
que se inicie desde el sistema, iniciando a partir de los docentes e ir integrando progresivamente a
los demás grupos, involucrando dentro de ellos a los estudiantes. Sin embargo, se debe recalacar que
una cultura de investigación no podrá orecer sin la disposición, deseo, curiosidad, conversación,